Preguntas frecuentes
Todo lo que quieres saber (y nunca te atreviste a preguntar)
La liofilización es un proceso que elimina el agua del kéfir a baja temperatura, conservando intactas sus cepas probióticas y propiedades nutricionales. Así, los probióticos llegan vivos a tu intestino sin necesidad de refrigeración.
Como quieras y cuando quieras. Disuélvelo en tu bebida, mézclalo con yogur o espolvoréalo en tus recetas favoritas. Su sabor es delicioso, así que queda bien en cualquier plato.
Depende de cuánto lo disfrutes. En promedio, unos 30 días con el consumo recomendado.
No. Gracias a la liofilización, los probióticos se mantienen vivos sin necesidad de frío. Cómodo, práctico y listo para llevar a donde vayas.
No, nada de eso. Es kéfir en su forma más pura: solo leche de cabra ecológica y fermentos lácticos. Natural.
Está elaborado con leche de cabra ecológica, por lo que no es vegano. Sin embargo, el proceso de liofilización reduce la lactosa, lo que lo hace más fácil de digerir.
Te notarás más ligera. Además, la salud intestinal está conectada con la piel y el estado de ánimo. Si tu microbiota está feliz, sientes un bienestar general en todo el cuerpo.
Porque cuentan con más cepas vivas, formuladas para resistir la acidez gástrica y llegar activas a tu intestino. Nuestro proceso de liofilización mantiene intacta su potencia, asegurando que obtengas el máximo beneficio.
Sí, es un complemento natural y seguro. Solo ajusta la cantidad según su edad y consulta con un especialista si lo necesitas.
Por supuesto. Es un aliado perfecto en esta etapa, ayudando a mantener tu microbiota equilibrada y fortaleciendo tus defensas de forma natural.
Sí, siempre que consumas lácteos. Está elaborado con leche de cabra ecológica y sin ingredientes de origen animal adicionales.
Sí. Sus probióticos naturales te aportan un extra de bienestar para rendir más y sentirte mejor.